¿Cuál será el punto culmine al que lleguemos?
¿La cima, la cúspide, la meta?
¿Cuál el ingrediente final de la receta?
Que decore el cadáver que un dia entreguemos.
¿Hasta qué punto expandiremos nuestra mente?
¿Cuántos libros resumiran nuestra vida?
¿Cuántos encuentros cabrán en mis huidas?
¿Cuantos futuros habilita éste presente?
No es posible que la gloria nos encuentre,
En el plácido sillón de los "no puedo".
Hay luz detrás del muro de los miedos,
Pero no podrá verla jamás, quien no lo enfrente.
Debemos despertar siempre con el objetivo,
Que comparte, cada noche, nuestra almohada.
Si lo perdemos nos quedaremos, sin nada.
Y moriremos, aún, estando vivos.
Nuestro sueño se construye cada día,
Al igual que fortalezas y castillos,
Colocando con amor cada ladrillo,
Sin descuidar la pasión y la osadía.
No olvidemos, que a luchar se aprende luchando,
Pero a vivir, no se aprende soñando.
Eguiazu Gervasio
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